Julián Conrado, para los verdaderos beneficiarios del narcotráfico, la oligarquía apátrida colombiana que representa a los EEUU, es “un narcoguerrillero”, igual que nuestro general Rangel Silva, un militar vinculado a los “narcoguerrilleros”, lo dicen sus medios con insistencia repugnante...
Política Gebeliana colombiana/EEUU.
Dignidad y ética soberana vs. Chantaje santanderiano de EEUU
Narcoterrorismo, Rangel Silva y Julián Conrado.
Dignidad y ética soberana vs. Chantaje santanderiano de EEUU
Narcoterrorismo, Rangel Silva y Julián Conrado.
Narcoterrorismo, Rangel Silva y Julián Conrado
Por Tamanaco de la Torre
Julián Conrado, para los verdaderos beneficiarios del narcotráfico, la oligarquía apátrida colombiana que representa a los EEUU, es “un narcoguerrillero”, igual que nuestro general Rangel Silva, un militar vinculado a los “narcoguerrilleros”, lo dicen sus medios con insistencia repugnante hasta la saciedad, con lo que imbéciles e ignorantes lo repite, incluso lo más triste, por algunos funcionarios del “alto nivel bolivariano”.
Todos sabemos que de cada 100 dólares que produce el “negocio de la heroína o la cocaína de exportación”, 96 dólares son manejados por la inmensa “lavadora” de dólares del Sistema Financiero Internacional controlado por EEUU y algunos bancos europeos. Los otros 4 dólares sobrantes del oprobioso negocio de las drogas, son para el pago de campesinos, red de distribución y tráfico. No obstante para la maquinaria gobeliana de infamias para la opresión, los narcotraficantes son nuestros pueblos y sus economías cuando ellos no las controlan, los narcotraficantes son los que nos oponemos a su saqueo y al terrorismo de Estado de sus gobiernos lacayos. Los Estados en procesos liberadores y antimperialistas como Ecuador, Bolivia y Venezuela, entre otros, son cómplices o actores conjuntos del “narcoterrorismo insurgente”.
El Comandante Chávez ha sabido enfrentar con dignidad a la jauría colombo/yanqui con sus pretensiones de descalificar, “descertificar”, por narcoterrotista a nuestro proceso, enfrentar las inclusiones de dirigentes valientes bolivarianos civiles y militares incluidos en las “tenebrosas” listas del Departamento del Tesoro de los EEUU.
El Comandante Chávez ha venido ejerciendo su ética bolivariana y soberana nombrando a Rangel Silva, sin espavientos ante el chantaje imperialista.
Ahora le toca a la justicia venezolana, a través de su Tribunal Supremo de Justicia y del Ministerio Público. El primero de febrero, a las 10 am, en la primera Audiencia Pública tienen la oportunidad de reafirmar la vigencia de nuestro andamiaje legal y constitucional, nuestra soberanía, y la ética bolivariana, rechazando la pretensión ilegal de extradición de Julián Conrado, combatiente bolivariano, que simplemente ha venido a nuestro país en busca de un territorio en paz para curar las secuelas de la guerra en su salud; guerra continuada desde el primer intento de resistencia aborigen a la invasión española y de la primera independencia bolivariana, traicionada por el santanderismo apátrida.
El crimen organizado no debe quedar nunca impune, particularmente cuando el crimen se organiza en Estado, como en el caso colombiano.
Reafirmemos la ética bolivariana y nuestra soberanía.
¡El miércoles 1ro de febrero todos al Tribunal Supremo!
¡Vamos a su encuentro!
¡Libertad y refugio para Julián Conrado!
¡Amando venceremos!
¡Vamos a su encuentro!
¡Libertad y refugio para Julián Conrado!
¡Amando venceremos!
Materiales y videos de consulta:
La ética de la justicia vs. la 'cordialidad' diplomática. Este miércoles estará en juego en el TSJ de Venezuela la libertad del cantor Julián Conrado y la hermandad bolivariana VS el santanderismo y la violación al DIH.
No hay comentarios:
Publicar un comentario