Pronunciamiento de la ABC contra la censura a la comunicación alternativa en Venezuela
Todos los hechos que han rodeado el proceso de captura y entrega del comunicador bolivariano Joaquín Pérez Becerra se encuentran enmarcados en la censura a la libertad de prensa:
Primero, la misma detención de Pérez que representa la voz disidente del gobierno colombiano más reconocida y leída no sólo en ese país; ANNCOL como ningún otro medio alternativo en Colombia tenía 800 mil visitantes en momentos de coyuntura política, que en Colombia es permanente.
Posteriormente, a una hora de la detención de Joaquín la expedición de un comunicado oficial que con un lenguaje propio de la derecha señalaba las razones de la captura, dictadas no propiamente por la INTERPOL sino por el ex asesor de Álvaro Uribe Vélez, José Obdulio Gaviria, un personaje oscuro reconocido por sus vínculos con el narcotráfico y el paramilitarismo en Colombia.
Luego, el día lunes 25 de abril, la convocatoria del MINCI a diversos medios a una rueda de prensa en el aeropuerto de Maiquetía con motivo de la posible entrega del compañero y la casi inmediata cancelación de la invitación bajo el argumento de que el proceso en cuestión se encontraba congelado.
Al instante, una cadena nacional del Ejecutivo, a la misma hora en que estaban trasladando al director de ANNCOL a Colombia.
Ahora, el Ministerio de Información y Comunicación de Venezuela (MINCI), en la persona del ministro Andrés Izarra, orienta a todos los Medios de Comunicación que dirige, a no cubrir ningún evento relacionado con las expresiones de solidaridad con Joaquín Pérez Becerra y más aún, con el reclamo de un amplio sector del pueblo revolucionario de Venezuela por la entrega y las condiciones de la relación Colombia-Venezuela y los nuevos acuerdos de ambos gobiernos en materia de "inteligencia" y cooperación militar.
Es lamentable el papel que han jugado los medios informativos que como, VTV y Telesur, han brillado por su ausencia en los lugares cruciales donde se ha desarrollado la noticia sobre la respuesta de la izquierda frente al caso de Joaquín Pérez. Sus reportes se han limitado a los comunicados del gobierno y las acusaciones del gobierno colombiano sobre los presuntos crímenes cometidos por el director de ANNCOL.
Han faltado a la verdad y sobre todo al compromiso de convertir a Venezuela en el espacio de construcción de una prensa comprometida con los intereses de las mayorías populares, con la ruptura del pensamiento único y con la hegemonía comunicacional capitalista que ha consolidado ese feroz sistema. Telesur y otros medios han faltado al principio socialista de construir una comunicación para la liberación.
En esta vía le respondemos a Iván Maiza en el único artículo de opinión publicado por Telesur que en palabras más, palabras menos asegura que el comunicador bolivariano se buscó la captura (como las mujeres que usan minifalda son culpables de su violación-observación nuestra-). Dice Maiza que el movimiento de izquierda posiblemente infiltrado por "algunos “camaradas” o algunos “partidos revolucionarios” han aventurado planes para sabotear las estrategias planteadas por el Comandante, ¿Incluso montando trampas a compañeros de lucha?, camaradas que no aceptan que el Comandante haya tomado la decisión de acercarse a Santos y están dispuestos a hacer cualquier cosa que “quiebre la confianza” entre Chávez y su pueblo, entre Chávez y los pueblos del continente".
No señor Maiza y señores de Telesur, los directivos de medios alternativos que hemos invitado en algunas ocasiones a Joaquín Pérez Becerra para consolidar un proyecto de comunicación bolivariana, ni trabajamos ni hacemos acuerdos diplomáticos con el DAS. Nosotros hemos invitado a Venezuela en diferentes ocasiones a Joaquín porque estábamos absolutamente seguros que nuestro gobierno jamás entregaría al gobierno fascista de Colombia, a un militante comprometido con la verdad, el ideario bolivariano, un militante que siempre ha defendido en diferentes escenarios de Europa este proceso que es esperanza de Latinoamérica.
Quién iba pensar que una entrega tan vil y alejada de todo derecho (hasta burgués) iba a ser posible en el país con el mayor número de emisoras comunitarias de Latinoamérica, el país que ha hecho tantos encuentros, congresos y coloquios sobre el papel de los medios de comunicación en la construcción de Nuestra América; el único país de Sur América en donde hay un proceso revolucionario que dice ser socialista; el país del premio Rodolfo Walsh a la comunicación popular.
Justamente en el encuentro de fundación de la Asociación Bolivariana de Comunicadores que realizamos en diciembre de 2008 y en la que participó Joaquín Pérez decidimos en plenaria que la sede de la ABC sería en Caracas por ser la cuna de nuestro libertador Simón Bolívar y el lugar más seguro contra la censura, las persecuciones y la difamación de la derecha. La escogimos porque consideramos que Venezuela necesitaba una Asociación que hiciera mella a las calumnias de la prensa burguesa y su Colegio Nacional de periodistas. Además se consideró que Caracas debía ser la capital de la unidad latinoamericana del sector comunicacional alternativo.
Así pues que le dijímos ahora, como en más de una ocasión, a nuestro querido compañero, "camarada Joaco, venga que ésta es tierra liberada".
!Nos equivocamos!
Todos los hechos que han rodeado el proceso de captura y entrega del comunicador bolivariano Joaquín Pérez Becerra se encuentran enmarcados en la censura a la libertad de prensa:
Primero, la misma detención de Pérez que representa la voz disidente del gobierno colombiano más reconocida y leída no sólo en ese país; ANNCOL como ningún otro medio alternativo en Colombia tenía 800 mil visitantes en momentos de coyuntura política, que en Colombia es permanente.
Posteriormente, a una hora de la detención de Joaquín la expedición de un comunicado oficial que con un lenguaje propio de la derecha señalaba las razones de la captura, dictadas no propiamente por la INTERPOL sino por el ex asesor de Álvaro Uribe Vélez, José Obdulio Gaviria, un personaje oscuro reconocido por sus vínculos con el narcotráfico y el paramilitarismo en Colombia.
Luego, el día lunes 25 de abril, la convocatoria del MINCI a diversos medios a una rueda de prensa en el aeropuerto de Maiquetía con motivo de la posible entrega del compañero y la casi inmediata cancelación de la invitación bajo el argumento de que el proceso en cuestión se encontraba congelado.
Al instante, una cadena nacional del Ejecutivo, a la misma hora en que estaban trasladando al director de ANNCOL a Colombia.
Ahora, el Ministerio de Información y Comunicación de Venezuela (MINCI), en la persona del ministro Andrés Izarra, orienta a todos los Medios de Comunicación que dirige, a no cubrir ningún evento relacionado con las expresiones de solidaridad con Joaquín Pérez Becerra y más aún, con el reclamo de un amplio sector del pueblo revolucionario de Venezuela por la entrega y las condiciones de la relación Colombia-Venezuela y los nuevos acuerdos de ambos gobiernos en materia de "inteligencia" y cooperación militar.
Es lamentable el papel que han jugado los medios informativos que como, VTV y Telesur, han brillado por su ausencia en los lugares cruciales donde se ha desarrollado la noticia sobre la respuesta de la izquierda frente al caso de Joaquín Pérez. Sus reportes se han limitado a los comunicados del gobierno y las acusaciones del gobierno colombiano sobre los presuntos crímenes cometidos por el director de ANNCOL.
Han faltado a la verdad y sobre todo al compromiso de convertir a Venezuela en el espacio de construcción de una prensa comprometida con los intereses de las mayorías populares, con la ruptura del pensamiento único y con la hegemonía comunicacional capitalista que ha consolidado ese feroz sistema. Telesur y otros medios han faltado al principio socialista de construir una comunicación para la liberación.
En esta vía le respondemos a Iván Maiza en el único artículo de opinión publicado por Telesur que en palabras más, palabras menos asegura que el comunicador bolivariano se buscó la captura (como las mujeres que usan minifalda son culpables de su violación-observación nuestra-). Dice Maiza que el movimiento de izquierda posiblemente infiltrado por "algunos “camaradas” o algunos “partidos revolucionarios” han aventurado planes para sabotear las estrategias planteadas por el Comandante, ¿Incluso montando trampas a compañeros de lucha?, camaradas que no aceptan que el Comandante haya tomado la decisión de acercarse a Santos y están dispuestos a hacer cualquier cosa que “quiebre la confianza” entre Chávez y su pueblo, entre Chávez y los pueblos del continente".
No señor Maiza y señores de Telesur, los directivos de medios alternativos que hemos invitado en algunas ocasiones a Joaquín Pérez Becerra para consolidar un proyecto de comunicación bolivariana, ni trabajamos ni hacemos acuerdos diplomáticos con el DAS. Nosotros hemos invitado a Venezuela en diferentes ocasiones a Joaquín porque estábamos absolutamente seguros que nuestro gobierno jamás entregaría al gobierno fascista de Colombia, a un militante comprometido con la verdad, el ideario bolivariano, un militante que siempre ha defendido en diferentes escenarios de Europa este proceso que es esperanza de Latinoamérica.
Quién iba pensar que una entrega tan vil y alejada de todo derecho (hasta burgués) iba a ser posible en el país con el mayor número de emisoras comunitarias de Latinoamérica, el país que ha hecho tantos encuentros, congresos y coloquios sobre el papel de los medios de comunicación en la construcción de Nuestra América; el único país de Sur América en donde hay un proceso revolucionario que dice ser socialista; el país del premio Rodolfo Walsh a la comunicación popular.
Justamente en el encuentro de fundación de la Asociación Bolivariana de Comunicadores que realizamos en diciembre de 2008 y en la que participó Joaquín Pérez decidimos en plenaria que la sede de la ABC sería en Caracas por ser la cuna de nuestro libertador Simón Bolívar y el lugar más seguro contra la censura, las persecuciones y la difamación de la derecha. La escogimos porque consideramos que Venezuela necesitaba una Asociación que hiciera mella a las calumnias de la prensa burguesa y su Colegio Nacional de periodistas. Además se consideró que Caracas debía ser la capital de la unidad latinoamericana del sector comunicacional alternativo.
Así pues que le dijímos ahora, como en más de una ocasión, a nuestro querido compañero, "camarada Joaco, venga que ésta es tierra liberada".
!Nos equivocamos!
No hay comentarios:
Publicar un comentario